Pan-Leopardo

Preparación

Forrar un molde de pan de 23x10 cm con papel sulfurizado y reservar.

Poner en una cacerola la leche y la fécula de maíz y remover con unas varillas hasta que la fécula esté completamente disuelta. Llevar a ebullición removiendo constantemente hasta que la mezcla espese. Deberá adquirir la densidad de unas natillas espesas. En ese punto apartamos del fuego, pasamos la mezcla a otro recipiente y la dejamos enfriar hasta que baje de los 50 grados.

Añadir la harina, el azúcar y la levadura. Amasar durante 10 minutos, hasta obtener una masa suave y elástica.

Cortar la masa en dos partes. Añadir a una de las mitades la ralladura de naranja amasando hasta que ésta se haya integrado. Esta será la masa blanca.

Cortar a su vez la masa restante en dos mitades. Añadir a una de ellas 15 gramos de cacao, amasando hasta que se haya mezclado completamente. Esta será la masa marrón oscuro.

Añadir a la otra mitad 5 gramos de cacao, amasando hasta que se haya integrado completamente. Esta será la pasta marrón claro.

Poner cada una de las masas dentro de recipientes herméticos y dejarlas reposar toda una noche en la nevera o de 1,5 a 2 horas a temperatura ambiente para que leven (Deben doblar su tamaño)

Transcurrido el tiempo de reposo, dividir cada una de las masas en 7 trozos más o menos iguales (No tienen por qué ser exactos, las manchas del leopardo no lo son!) y proceder de la siguiente forma:

- Tomar una porción de masa marrón claro, formar con ella un cilindro de unos 15 cm y aplanarlo longitudinalmente con el rodillo. Enrollarlo sobre sí mismo.

- Tomar una porción de masa marrón oscuro, formar con ella un cilindro de unos 15 cm de largo y aplanarlo longitudinalmente con el rodillo. Poner encima el rollo de masa marrón claro y enrollar hasta cubrirlo completamente.

- Tomar una porción de masa blanca, formar con ella un cilindro de unos 15 cm de largo y aplanarlo longitudinalmente con el rodillo. Colocar encima el rollo formado por las dos masas marrones y enrollar hasta cubrirlo completamente.

Repetir este proceso siete veces, hasta terminar con 7 rollos formados por las 3 masas.

Hacer rodar cada rollo con las manos sobre la superficie de trabajo hasta obtener una longitud del doble del molde donde se va a hornear el pan, es decir, unos 40 cm. Cortar cada uno de ellos por la mitad.

Colocar los rollos por capas en el molde. Cubrir el molde con film de cocina y dejarlo reposar hasta que doble su tamaño (De 1,5 a 2 horas) Mientras tanto, precalentar el horno a 200º.

Cuando el pan haya doblado su tamaño, pincelarlo con un poco de leche. Al introducirlo en el horno, bajar la temperatura a 180º. Utilizar el horno con función vapor. Si no se dispone de ella, introducir una bandeja con cubitos de hielo en la parte inferior del horno justo después de colocar el pan para así crear el vapor necesario.

Hornear durante 35-40 minutos. Retirar del horno, dejar enfriar durante 10 minutos, desmoldar y dejar enfriar completamente sobre una rejilla.

Para servir: Fundir el chocolate a baño maría o en el microondas, cubrir el pan con el chocolate fundido y decorarlo con las avellanas.