A veces cuesta que los más pequeños coman fruta, un alimento muy necesario para ellos ya que les aportan vitaminas y otros nutrientes esenciales para su crecimiento, así como fibra y antioxidantes. El chocolate puede ser un buen compañero para hacernos esta tarea más fácil y conseguir que los niños se animen a probar los vegetales.
En este post vamos a daros algunas ideas para que comer fruta sea más divertido. Y es que cuando la comida es atractiva y entra por los ojos, aumentan las ganas de comer de los niños. Además, cuando combinamos las frutas con el chocolate, también aportamos a los pequeños un alimento que, tomado con moderación, aporta energía y otros beneficios para el organismo.
Pingüinos de chocolate y plátano
Un plátano cortado por la mitad, chocolate fundido y un par de caramelos bastan para convertir una aburrida fruta en un divertido personaje al que los niños no podrán resistirse.
Piruletas de kiwi
Las brochetas de frutas son muy famosas, pero… ¿y si convertimos la fruta en una piruleta? Un postre divertido que además nuestros pequeños se pueden comer fácilmente sin necesidad de cubiertos.
Mandarinas bañadas con chocolate
Tomar naranjas y mandarinas en invierno es muy importante, ya que la vitamina C que contienen ayuda a combatir los resfriados tan comunes de estas fechas. Sus gajos, bañados en chocolate, son irresistibles.
Crepes con frutas
Si queremos que nuestros niños merienden frutas, pero no sabemos cómo hacerlo, meterlas dentro de un crepe puede ser la solución. Y también las podemos acompañar de chocolate caliente para hacerla todavía más deliciosas.
Sandwiches de manzana
La manzana es una de las frutas más socorridas, ya que está disponible en las tiendas todo el año. Estos divertidos sandwiches en los que el pan se sustituye por rodajas de manzana y que podemos rellenar con chocolate es una opción diferente para que los pequeños disfruten de ella.